Se espera que iniciativas pioneras, como lo es FPAD, sean un punto de referencia y un modelo de mejores prácticas para otras soluciones de pago.
Una profunda transformación a nivel global está experimentando el ecosistema de pagos por la demanda de transacciones más rápidas y eficientes. En Latinoamérica y la Zona Euro, particularmente, el foco está puesto en facilitar este tipo de operaciones financieras en tiempo realbasadas en los pagos inmediatos.
Las cifras son concluyentes: en Latinoamérica los pagos inmediatos han ganado terreno como una solución destinada a mejorar la eficiencia y reducir la dependencia del efectivo, con sistemas que funcionen 24/7 y ofrezcan la capacidad de realizar pagos instantáneos entre bancos, lo que ha impulsado a los gobiernos y autoridades financieras a desarrollar infraestructuras modernas de pagos.
Bloomberg, de hecho, destacó que en 2023 América Latina llegó a los 10.000 millones de transferencias en tiempo real. Puntualmente, en algunos países de la región los Bancos Centrales, Redes y Cámaras de Compensación han jugado un rol importante en la ejecución de estas iniciativas, destacándose los sistemas SPEI, CoDI, Dimo en México, Argentina (Transferencias 3.0), Colombia, (Bre-B Transfiya), Brasil (PIX), y recientemente en Perú, con la firma entre el Banco Central de Reserva y el Banco de la Reserva de la India para implementar el modelo UPI.
Pese al incremento de estas alternativas, Paola Sánchez, Business Developer de RiskShield en INFORM para Latinoamérica, dice que si bien los sistemas de pago interoperables en LATAM no se encuentran integrados a nivel regional como ocurre en Europa, lo que genera barreras para los pagos transfronterizos dentro de la región, sí constituyen un primer paso para el desarrollo de estas iniciativas. “Se debe tomar en cuenta como referencia la dinámica en la zona Euro en su proceso de estandarización, así como los ajustes a su modelo con el fin de mitigar y prevenir el fraude”, afirma la especialista.
SEPA y FPAD, hacia mejores prácticas
Si bien en Latinoamérica esta tendencia ha ido al alza, en la Zona Euro dieron un paso más importante a través de la implementación de la “Zona Única de Pagos en Euros” (SEPA), un esquema que permite a los ciudadanos y a las empresas realizar transferencias y cobros electrónicos en euros de manera única, ya sea a nivel nacional o transfronterizo, para eliminar las barreras entre fronteras.
La experta de INFORM sostiene que SEPA ha logrado una alta estandarización en los pagos electrónicos mediante el uso de formatos XML (ISO 20022), mejorando la interoperabilidad entre los sistemas bancarios de los 36 países y territorios participantes de la Unión Europea. Al mismo tiempo, los defraudadores también se han aprovechado de la eliminación de barreras y de la introducción de los pagos en tiempo real, por lo que también ha aumentado una actividad fraudulenta más integrada.
“Para enfrentar este problema, la Unión Europea está redefiniendo la normativa sobre pagos instantáneos, mientras que los bancos europeos están uniendo fuerzas con EBA CLEARING (proveedor de infraestructura de pagos paneuropea), para desarrollar una nueva funcionalidad llamada ‘Detección de patrones de fraude y anomalías’ en español (FPAD), para ayudar a los proveedores de servicios de pago (PSP) en la lucha contra el fraude”, plantea Sánchez. Cabe destacar que FPAD ofrece una amplia gama de herramientas de lucha contra el fraude en tiempo real -basadas en patrones de fraude y anomalías- que se pueden identificar a nivel de la red SEPA.
Debido a la importancia del FPAD en la mejora de la seguridad de los servicios de pago en toda Europa, los proveedores de servicios de pagos están enfocando sus esfuerzos en incorporar a su sistema de protección contra la delincuencia financiera los indicadores de fraude adicionales proporcionados por EBA CLEARING.
“En INFORM tenemos la solución RiskShield basada en IA híbrida que se integra perfectamente con la nueva oferta de servicios de EBA CLEARING. Esta solución integra plenamente los indicadores de riesgo de FPAD y los resultados de las comprobaciones de IBAN/Nombre en su lógica de decisión, ofreciendo capacidades de prevención del fraude mejoradas y unificadas en tiempo real. Al integrar la puntuación de riesgo de FPAD, RiskShield garantiza que las entidades se beneficien de los últimos avances en detección de fraudes, proporcionando una sólida defensa contra sofisticadas actividades fraudulentas”, detalla la especialista.
Entre los desafíos a futuro, Sánchez espera que esta iniciativa pionera, como lo es FPAD, sea un punto de referencia y un modelo de mejores prácticas para otras soluciones de pago. “Ya sea en LATAM o en otras partes del mundo, los retos son similares en materia de prevención y monitoreo del fraude. Creemos en un futuro en el que la inmediatez, la seguridad y la eficiencia en los pagos serán fundamentales para el crecimiento económico y la transformación digital”, concluye Paola Sánchez.